examen de Historia

"¡Giancarlo Egúsquiza!!" Me paré timorato a recoger mi evaluación de Historia. Poco a poco iba aproximándome hacia el lejano escritorio de la profesora mientras que en mi cuerpo sentía algunas vibraciones debido al nerviosismo imperante en ese cruel momento. Temía lo peor y los sonidos que hacian mis zapatos al caminar tan suavemente acompañaban este presentimiento de que algo cruel iba a ocurrir. Pensaba en todo lo que existía, al ir imaginando los efectos que podría causar el resultado de ese exámen, todo lo que ocurría en ese instante: murmullos, suspiros, desprendimientos alegres y tristes de otros alumnos. Me encontraba masticando insultos, debido al presentimiento que tenía. Era como si no debiera recoger esas hojas en donde una anciana veía cuánto yo sabía acerca de las cojudeces que nos narra en sus estupidas clases. "¡Trae para acá!", le dije frente a su escritorio a la vieja profesora. "Ya sabía que me iba a jalar". Todos los demás alumnos reían a carcajadas mientras que yo estaba molesto y lleno de ira frente a esa vieja desgraciada. La profesora también sonrió y me dijo: "¡Bruto, estudie y no escriba tonterías!!". Los demás seguían riendo.

El sol se ocultó y se hizo de noche, se oscureció y esos alumnos ya no reían... todos yacían en el suelo asfixiados por el olor a gas, el tóxico aroma que quedó en esa aula de Historia luego de que prendiera el cuerpo de esa vieja malnacida... ¿Por qué me jala pe...!!?