me voy a pasar al otro cuarto, ¿crees que no?. voy a atravesar las paredes cuando menos lo esperes. pero primero voy a hacer la pichi. ahhhhhh, ya está. puedo entrar al baño pero no pasarme al otro cuarto. aún la pared no se pone blanda. se ha puesto negra, pero por suciedad. es que por la ventana entra mucho polvo y el smog de esta ciudad contamina hasta por debajo de la cama. pichi otra vez. carajo. ya, voy y tomo un vaso de agua, sirvo de la jarrita de plástico y lleno el vaso de vidrio. con la garganta remojada grito un poco y luego me echo a ver tele. pero me distraigo un rato y veo la pared. la toco, siento su frialdad. al otro lado de esta pared está el otro cuarto. no he podido entrar. ¿estará frío también?. estoy preguntándole al control remoto si es que puedo ver en la tele algo más entretenido que la pared. ganas de pichi. pucha.
es que tengo sed, hace calor, la pared me mira, me intriga el otro cuarto. se oyen unos leves ruiditos, toco la pared y no se ablanda por nada. voy a abrir la pared con mis uñas. pero al raspar la pared con las uñas siento feo, una sensación molesta, ¿no sienten eso?. raspa ahorita la pared con tus uñas, vamos chica, chico, grande, chata. raspa para que pases al otro cuarto.
Crítica #902: LA GATA QUE SE COLÓ EN MI SHOW
Hace 2 horas.
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