martes, 2 de febrero de 2010

guarda ahí

tengo un gran fajo de dinero en las manos. guarda ahí. si tú no lo guardas, me lo voy a gastar. por eso, guarda ahí. yo me conozco, no controlo mis ímpetus. guarda ahí. tengo ganas de comprar, comprarme y comprarte. la plata no entra a mi bolsillo, sólo sale. guarda ahí. no en tus bolsillos, ni en tu casa, ni en el banco. guarda ahí. porque aquí, me lo gasto, me lo tiro, desaparece, se hace humo. aquí no, ahí sí. guarda. me iré caminando hasta tu casa, pasaré por tu avenida, andaré por ahí. me verás aquí, con la mirada hacia arriba, fijamente. guarda. yo no me guardo nada. tú guarda. ve guardando. un poco de tiempo, un poco de luz, un poco de vida. las horas y los minutos, guárdalos. ahí, sí, ahí mismo. y guarda la ropa bonita en tus cajones, encima del dinero que has guardado por encargo mío. porque ahí lo has guardado, ¿no?. yo aquí espero y confío. metido en mis ideas, guardándolas. y tú ahí, guardas. te res-guardas y yo a-guardo. con agua, guarda ahí.

No hay comentarios.: