martes, 28 de junio de 2011

pie pisado

no sé qué duele más, que te pisen el pie por casualidad o que no sólo te pisen el pie sino que la persona que te ha pisado te pida perdón por el pisotón. si es cierto eso de "ojo por ojo...", la disculpa no tiene ningún sentido, lo que debe suceder en el instante inmediatamente posterior al pisotón es devolvérselo al autor de semejante agresión, hay que ser recíprocos, pienso yo. claro que la respuesta deberá ser proporcional y equilibrada, pues quizás con ese afán revanchista y vengativo que tan humano es, devolvemos la pisada con fiereza y mucha ira, utilizando incluso el taco del zapato para hacer más daño. necesitaríamos entonces un veedor que pueda verificar que no se cometa un abuso en el momento de realizar el justiciero acto de reciprocidad contra el agresor, una persona que tenga la facultad de medir la energía con la que se va a pisar el correspondiente pie, porque puede suceder, cómo no, que se pise con tal intensidad que la nueva víctima también quiera ser recíproco y responder porque la pisaron más fuerte de lo que ella pisó. al final, tendríamos un escenario de pisadas y pisotones interminables con los que no lograríamos alcanzar esa justicia tan pretendida y mas bien, podría incrementar las agresiones ya no sólo sobre los pies sino sobre las demás partes del cuerpo. así que, lamentablemente, vamos a tener que seguir conformándonos con la "disculpa". qué dolor.

como joden / cómo haces

cómo hace usted señor para ser tan jodido, me pregunto yo. como jodes tanto, ya no te quiero tratar ni contratar, no quiero que me jodas...

cómo jodes tanto, cuánta capacidad para joder, cómo haces. parece que ese ánimo de ser jodido no se aprende, uno nace con él. pero esa sensación de estar siendo jodido provoca reacciones, una respuesta para detener al jodido, para que usted señor ya no joda...

debería ser más fácil responder con un "no jodas", simple y directo... no jodamos ni nos dejemos joder

lunes, 27 de junio de 2011

sentada en el suelo

estás sentada en el suelo frío, quieta, como si el suelo te diera paz. en cambio, yo estoy sentado en la silla roja, tibia, como si mereciera esa comodidad. te veo sentada, en calma, con tus piernas estiradas, las plantas de tus pies me miran pero tus ojos no. no sé qué miran, no miran nada pero a la vez parece que miraran todo. y me inquietan, me perturban en estos escasos segundos. la luz se enciende y la oscuridad desaparece. debo cerrar mis ojos un instante y sin verte siento que te paras y te mueves. estiras tu cuerpo, quieres tocar el cielo, llegar a lo más alto y bailas. abro los ojos de nuevo y te veo bailando, dando vueltas, casi alzándote para volar. y, efectivamente, vuelas. con tus brazos flexionándose, con los dedos de las manos estirados. y yo me acomodo en mi silla roja y me mantengo estático mientras tú luces completamente blanca y dinámica. soy incapaz de hacer lo que tú haces, no podría flotar, saltar y de pronto desaparecer. lo único que puedo hacer en este momento es estirar mi brazo, mis cinco dedos de la mano para ver si me elevo de la silla roja y transito imaginariamente por esta atmósfera. me dejo llevar por este breve instante y la luz se vuelve a apagar. de pronto cantas, escucho una dulce voz que se transforma en lamento, en quejido, en un grito de dolor. y sin que pase mucho tiempo, sucede que te ríes, suenan carcajadas, la risa posterior a la lamentación. se produce un silencio. de repente, la luz vuelve a encenderse acompañada del sonido del agua, gotas de agua que se convierten en fuertes corrientes de agua que todo lo invaden y mojan el suelo donde te volverás a sentar, lo sé. estás sentada en el suelo húmedo, calmada, reposando luego de aterrizar y efectivamente, el suelo te da paz y lo noto. yo, en cambio, aturdido, me recuesto en la silla roja, pongo mis manos sobre mi cara y sollozo.

lima

lima no es una ciudad horrible, porque así lo dijeron hace unos años, lima la horrible. los horribles somos los limeños, muy feos a veces. tenemos una pésima conducta que nos afea mucho y cuando no queremos portarnos mal nos contagian los más feos limeños de esta ciudad, aunque no queramos, tenemos esa capacidad de afearnos, de volvernos horripilantes. lima limón es la capital del perú peruón y como ciudad capital puede merecer la pena capital, sin contemplaciones. somos limeños y si lima es limón, seguramente exprimimos la ciudad y nos sale una limonada bien agria. porque nuestro jugo tendrá un horrible sabor, un color gris como el cielo limeño y no puede haber una limonada que sea gris y que sepa rico. ¿se le puede quitar lo horrible a lima? habría que sacarle muchos limeños, habría que pasarle una lima como si la ciudad fuera una uña y perfilarla, embellecerla, reducir sus imperfecciones. sería bueno tener una lima grande para limar lima. así seríamos unos limeños bien limados, menos horribles, sublimados. quizás entonces, la limonada salga algo dulce.

viernes, 24 de junio de 2011

no te creas

a ver, comencemos. llego temprano a trabajar todos los días, pero no trabajo a la hora que llego. entonces mi presencia puntual aquí es ineficiente, inútil, sin sentido. deberían reconsiderar el horario de trabajo, mezclarlo con un horario de relajo. o no sé. a ver terminemos. me voy temprano del trabajo y me relajo desde la hora que salgo, entonces mi ausencia es eficiente, útil y con absoluto sentido. mejor es irse que llegar, concluyo.

miércoles, 22 de junio de 2011

enemigos

debe haber alguna forma de combatir al enemigo sin emplear la violencia. yo no la conozco así como tampoco mi enemigo conoce los límites de lo permisible. me cansa y como es mi enemigo, no encuentro la forma de tratar con él. como lo que más tengo yo son amigos y sé tratarlos, me cuesta saber cómo reaccionar ante las acciones de mi enemigo principal. yo puedo conversar con la gente y proponer salidas a diferentes situaciones, de una manera frontal y clara, matizándolas con un ingrediente ameno o lúdico. pero con mi enemigo la conversación es inviable.

con la enemiga en cambio, no quiero combatir, tolero totalmente su comportamiento. ella hace lo que quiere y es feliz así. no es mi amiga evidentemente, entonces ¿por qué sería mi enemiga?. pues por la cara que tiene. esa cara es de pocos amigos y obvio que dentro de esos pocos no estoy yo, lo cual me deja satisfecho. cara de enemiga, definitivamente. cara fea, mujer fea, enemiga mía, del espejo y de la estética.

enemigos míos, si yo pudiera evitarlos, lo haría. si tuviera la posibilidad de cambiarlos, también. si hallara la manera de combatir al enemigo o de ignorar a la enemiga, sentiría la paz. pero hasta ahora no puedo. necesito ayuda.

martes, 21 de junio de 2011

momentos íntimos

todos tenemos definitivamente momentos para uno mismo, momentos en los que uno está solo, completamente solo, o cree estarlo. instantes sublimes en los que uno llega a su casa, luego se mete a su cuarto y se "pone cómodo". y ponerse cómodo significa, entre otras cosas, despojarse de la ropa con la que uno pasó el día, desvestirse y notar en las prendas el trajín del día. primero, sacarse los zapatos, lo que supone una liberación para los pies, sacarse las medias y aventarlas lejos, no sin antes, quién lo impide, estás solo y crees que nadie te ve, olerlas ligeramente porque es tu media, o no?. ya con los pies descalzos puedes sobarte la planta o jugar con tus dedos, quizás separarlos porque se quieren mucho y se "apegan" a veces de más. otra vez, tienes la opción de oler. luego de ese ritual apoyas tu pie en el suelo, puedes sentir que tienes los pies sobre la tierra, luego ya con más calma, sale el polo, sale el pantalón, que suenan porque salen con tu energía acumulada de toda la jornada. y claro, antes de irte a la ducha para el baño de rigor, mandas a volar al calzoncillo que probablemente se quede pegado en la pared. esos son momentos íntimos, claro que puede suceder que por alguna casualidad de la vida o una muy bien llevada mala costumbre no te bañes y te quedes en la cama, mirando al techo, tirándote unos pedos (recuerda, estás solo), aspiras su olor, lo comparas y luego, ya para dormirte te quedas con esa ropa interior sudada hasta el día siguiente. no lo recomiendo, por experiencia. se pega.

lunes, 20 de junio de 2011

chavo, chavito... ese chavo


desde niño tuve siempre acceso a la tele, a todos los programas de niños que daban en esa época y me pegaba a los dibujos y series que estaban dirigidas a ese "público infantil" del que yo formaba parte. por esos años, principios de los ochentas, muchos dibujos pasaron por los canales de televisión y cada vez que salía un dibujo nuevo, el anterior pasaba de moda y yo lo abandonaba. pero hubo un programa, de hecho, que era el mejor. un programa para el que siempre existía un tiempo, la preferencia por él no tenía rival ni competencia válida. el programa más esperado y por el cual yo terminaba las tareas del cole lo más rápido que pudiera: "el chavo del ocho". nada podía reemplazar el momento de ver "el chavo", no existía para mi un instante de mayor alegría televisiva, verlo salir del barril mientras escuchaba al locutor diciendo: "este es el programa número uno de la televisión humorística... el Chaaaaaaaavo" y luego mencionaba uno a uno a los actores y el nombre de su personaje, terminando con el productor enrique segoviano y el director roberto gómez bolaños. no recuerdo la primera vez de cada capítulo, pero sí me acuerdo de las risas y carcajadas (y algunas penas y tristezas) que me provocaban todas las escenas, que a pesar de haber sido ya vistas con anterioridad causaban la misma gracia (y a veces más). no podía reirme más cada vez que el chavo metía la pata, cada vez que don ramón se escapaba del señor barriga, cada vez que Quico sacaba el mejor juguete de su casa para "ganarle" al chavo, cada vez que la chilindrina con viveza se burlaba y les ganaba al chavo y a quico, cada golpe que recibía el señor barriga, cada vez que la bruja del 71 se le insinuaba a don ramón y cantaba "que alegre va maría", cada vez que llegaba el profesor jirafales y a doña florinda le cambiaba la cara de repente, mientras sonaba una melodía romántica muy graciosa y se decían el diálogo siempre repetido de la tacita de café, cada vez que el chavo se metía al barril llorando pipipipipi y estando dentro del barril le decía a la chilindrina "pásale", cada vez que don ramón pellizcaba a quico y ponía su cara de placer mientras lo hacía, cada vez que quico decía tres o cuatro frases antes de decir "me doy", su cara de molestia al decir "no me simpatizas" o "cállate cállate que me desespeeeeeeeeerás", cada vez que la bruja del 71 decía que no era bruja, y don ramón la defendía diciendo que su nombre era doña clotilde, pero que de cariño le decían bruja, cada vez que doña florinda con sus aires de grandeza le decía a quico: "vámonos tesoro, no te juntes con esa 'chusma'"(chusma fue una palabra que definitivamente el chavo hizo famosa, antes yo ni siquiera sabía qué significaba). son miles de situaciones que en este momento no puedo ponerlas todas, qué más quisiera, pero sé que de niño siempre me divertí con el chavo y que ahora adulto también me divierto, aunque me pregunten que cómo me puedo reir si ya he visto las mismas situaciones más de cien veces. para eso no hay respuesta alguna que valga, porque las hilarantes y repetidas situaciones que se dan en el chavo no fueron hechas "sin querer queriendo" sino "queriendo con querer". y luego de haber compartido con esa vecindad más de veinticinco años (en mi caso) uno no pudo hacer otra cosa que encariñarse con cada uno de los personajes y matarse de la risa con el chavo quedándose dormido en el patio de la vecindad, con quico haciendo como ambulancia, con doña florinda y su peinado del "salón de belleza", con el profesor jirafales (o maestro longaniza para los patas) tratando de educar a don ramón corrigiendo sus errores al hablar, con el señor barriga aplaudiendo para hacerle barra a su equipo "monterrey, monterrey, monterrey, rra, rra, rra", con la chilindrina llorando "güeee güeee güeeee, vas a ver te voy a acusar que me gritaste, que me pegaste y me agarraste a patadas", con quico gritando "mamáaaaa" para todo y castigando al culpable de siempre "ron damón" con su "chusma, chusma, pfff", con don ramón vendiendo "la lechi" o de "ropavejero" o de "peluquero" (fígaro, fígaro) o de "carpintero" o de "zapatero", con la bruja del 71 preparando pasteles y comidas en su afán de enamorar a don ramón sin ningún éxito y obviamente con el chavo del ocho cazando lagartijas con la resortera, coleccionando "inseptos" que mataba con gasolina, lustrando zapatos "dando bola", haciendo equilibrio con la escoba, juntando botellas para venderlas al señor de la tienda y poder comprarse la tan ansiada "torta de jamón", durmiendo en la puerta de la casa de don ramón para que le dé su desayuno, jugando con la chilindrina y siendo víctima de sus trampas, compitiendo con quico al que siempre le "descalabra los cachetes" con tres puñetes, enamorándose de patty y desmayándose después de recibir un beso de ella, vendiendo aguas frescas en la puerta de la vecindad, de jamaica, limón y tamarindo (no hay de piña), comiéndose todos los churros que don ramón le había encargado que cuide, saliendo debajo de la mesa de la casa de don ramón cuando se hizo la sesión espiritista de los espíritus chocarreros, pateando penales y gritando "goooool de borja", aprendiendo a guitar la tocarra, presentando su innombrable número del "perro arrepentido" (catorce veces), yendo de invitado por el señor Barriga al viaje a Acapulco, luego de quedarse solito y abandonado en el patio de la vecindad (lagrimón), siendo expulsado de la vecindad por ratero (uno de los capítulos más tristes sino el más triste de todas las temporadas) por culpa del señor hurtado que guardaba todo lo robado en su barril, o persignándose como loco dentro de la casa de la bruja del 71 y diciendo "otro gato" y escapándose de todos en la vecindad que lo perseguían porque no se quería bañar. hay muchas más situaciones definitivamente, estos son algunas de las que me acuerdo y que quise escribir aquí y compartir para celebrar hoy 20 de junio de 2011 los cuarenta años de la primera emisión del chavo del ocho y agradecer a roberto gómez bolaños, carlos villagrán (pirolo), florinda meza, maría antonieta de las nieves, rubén aguirre, edgar vivar y angelines fernández por el tremendo programa que hicieron todos y que nos dejo muchas alegrías y recuerdos imborrables. en verdad no pensé escribir tanto, pero "se me chispoteó", así que sólo me queda decirles: "bueno, pero no se enojen".

miércoles, 15 de junio de 2011

poder no tengo

tengo muchas cosas, como el hambre, la sed, las ganas y el desgano, pero el poder no lo tengo. creo sentirlo levemente y creo que estoy facultado para ejercerlo, pero al final, no lo ejerzo porque no lo tengo. dame el poder y quizás lo use menos de lo que debería o quisiera. siento que todos quieren tener el poder y que éste sea inquebrantable, incuestionable y único. yo puedo y tú no. pero el poder que no tengo puede surgir, no hay nadie que me impida o evite que lo tenga de pronto. pero el poder requiere mucho valor, mucha convicción y mucho egoísmo. creo que puedo pero poder no tengo. si vieras como me pongo ante la falta de poder, como mi mente se llena de ideas y rebusca en el fondo de mi cabeza la posibilidad de contar con el más mínimo poder, pero no hay nada. voy a comenzar a experimentar lo que significa tener poder, hacer valer la voluntad individual frente a la colectiva, tengo que poder poder y bajo el ejercicio de mi poder, no me detengo porque poder no tengo.

trabajandoloco


trabajando
trabajo
trasubo
trasubiendo
traguitarra
traguito
traeguita
trabajodida
trabajala
trabajoneado
trabajo
trapiano
trapeando
trapero
trasinembargo
tras
trabajo
tralto
trchato

¿no te acuerdas, huevón?

la verdad es que no te acuerdas de nada. eres un huevón por no acordarte. por no. no eres un huevón porno. aunque sí lo sé: ves mucha porno. pero esto no tiene nada que ver con la porno. no, para nada. solo que estoy muy sorprendido porque te has olvidado de algo importante. algo que deberías recordar para que ahora no estés tan impaciente pensando en qué va a pasar con katerina y luciana. huevón, ellas dos te tendieron una trampa hace dos años y te humillaron huevón. y ahora tú, con la mejor voluntad del mundo, estás llamando a las dos. a katerina para que vaya a bailar contigo el viernes y a luciana para que te lleve a su casa en azpitia para pasar el sábado y el domingo. quieres intentar algo osado con las dos, pero ambas, se han negado a salir contigo, no te pasan ni te soportan. tú has gastado en llamadas, en regalos, en todo tipo de atenciones y en todo este tiempo no has conseguido ni mierda, huevón. pero está bien, quieres insistir e intentar algo con las dos ya que no te acuerdas lo que pasó en dos mil ocho, pues, si no te acuerdas, acuerda algo con ellas. la verdad, la única solución que yo encuentro para que tengas algun tipo de satisfacción y logres algo, te lo digo con sinceridad es que te pongas de acuerdo con ambas, conversa por separado con cada una, establece unas condiciones y les pagas. claro, haz un contrato con las dos, págales y verás que todo se compra huevón. de verdad, no sufras más.